sábado, 27 de abril de 2013

Ayer me vi una cana


un drama! (en casa aún se ríen, les falla la solidaridad femenina) y es que parece que no, pero el tiempo pasa, y las cosas no dejan de recordarlo, las navidades empiezan y se acaban, el 1 de julio está ahí y de golpe es el 30 de septiembre, llega tu cumpleaños y añades más números, los hay horrorosos, el 35 aún, pero cumple 39 a ver qué tal... y ahora me he dado cuenta que llevo aquí un año, que se dice pronto.
En este tiempo he estado muy entretenida con las minis, pero he tenido una crisis, de la del € también que de esa tenemos todos, pero yo tengo una crisis miniaturista,  ¿que cómo se come?, pues para resumir: que no sé para qué sirvo en el mundo de las minis, mis amigos me lo dicen, “todo lo pruebas pero no te quedas con nada”, mi madre es más expeditiva (cosa de madres):
“¿pero ahora que se te ha ocurrido?, alma de cántaro!!”


Aquí estoy yo:

  • que pruebo el fimo: vale, ya se como se toquetea, se cuece y hay que ver qué churro me ha salido, pero esto no es lo mío, lo voy a dejar ahí bien cerradito por si me da otro día por algo
  • monto un kit: ah!, así que éste es el tiempo que necesito para que se seque la cola blanca, y el destornillador va a la derecha y a la izquierda, caray, pues nada, dos camisetas echadas a perder más tarde con el pegamento, no vuelvo a montar otro a menos que sea imprescindible
  • los imprimibles, encuentra el papel ideal, corta por la línea (misión imposible desde el parvulario) y pega (lo de pegar es igual si madera, ropa, o papel, estoy genéticamente imposibilitada para ello).

Así que después de un año, y pensar (una pizquita), he deducido (quien mejor que uno mismo para conocerse) que a mí lo que me gusta es cotillear lo que hacen los demás,encontrar cositas que coleccionar y apagar mis “neuras” ¿cómo se hace esto último?, pues estoy yo un día en el trabajo, allí sentadita esperando a que alguien venga a preguntarme algo (sí, me dedico a eso, vienen y me preguntan cosas , algunas muy divertidas, de momento ninguna de miniaturas, pero no pierdo la esperanza), cuando “pum”, bueno, es más bien “toc,toc”, se me mete algo en la cabeza, una idea que tengo que llevar a cabo o no duermo, y ahí me tienes los próximos días recortando, fimeando, comprando, hasta que lo acabo y a otra cosa mariposa, total, que vamos a dejar a los artistas, que son muchos, que sigan haciendo esas cosas maravillosas que tanto envidio desde la distancia (a los primeros todos vosotros, los veintisiete, cada uno en su mundo, y que sois tan amables de pasaros por aquí) y yo seguiré aquí sin pretensiones con mis apañaduras, je.

Y estas son las últimas cosas que han entrado en casa. Hay que enseñarlas que son preciosas,¡muchas gracias mafalda200! tu gallina ha tenido un éxito apabullante, la tengo supervigilada, no sea que un día de estos me la encuentre en otro gallinero...





sábado, 13 de abril de 2013

Dando saltitos paquí pallá

Es agotador esto de no hacer nada, bueno, ir a trabajar sí lo he hecho, pero luego, emmmhh? pues aún estoy averiguando en que he gastado el tiempo, total que de hacer minis nada de nada, aparte de leer los blogs, y comprar algún capricho, cada día hay más preciosidades. 
Así que hace unos días me dio mono de cositas y planté encima de la mesa del comedor mi pastelería.




En realidad  no me apetece una pastelería, pero el nombre está ya decidido y como le tengo un cariño especial no quiero cambiarlo y es que, ¿qué más podría pegar con “Dulce soledad”?, no veo yo una charcutería ni un taller mecánico, tampoco harían juego con el papel pintado...  nada, que me he empachado sólo de ver tantos cupcakes, tartas, galletas, nata y chocolate. 






He reorganizado el interior, sacando algunas cosas que tenía en los cajones



y la he limpiado de los pasteles que yo había hecho años ha (más de 10?) con plastilina, que oye no están tan mal (teniendo en cuenta el momento y el material), alguna cosa guardaré como recuerdo.

Y ahí sigue encima de la mesa, esperando a que me aburra de salir “a darle a la pata”, como dice mi madre. A ver si hace demasiado calor y me tengo que volver a encerrar y adelanta la cosa.